El truco de la Coca-Cola no es tan sólo un truco. El truco de la Coca-Cola es una excelente estrategia de marketing que le permite a la famosa marca de refrescos que las personas recuerden y se decanten por su marca y no otra.
Este truco o estrategia de marketing la he sacado del extraordinario libro y bestseller titulado Buyology de Martin Lindstrom. Se trata de un libro que te enseña de forma amena, práctica y sencilla por qué compras lo que compras, es decir, qué te decide a comprar un producto y no otro.
Pero lo que más me gusta de Buyology es el poder que ejerce el neuromarketing a la hora de vender un producto o servicio. En el artículo de hoy te voy a explicar este truco de Coca-Cola y lo relacionaré con la manera con que puedes enseñar en el aula y que dicha enseñanza tenga más oportunidades de que se quede fijada en la memoria de tus alumnos.
¿Quieres conocer el truco que ha hecho aún más rica y famosa a la marca de refrescos Coca-Cola? Pues empezamos.
Coca-Cola y American idol. Como recordar para no olvidar.
Seguramente conocerás o habrás oído hablar del famoso programa de televisión American Idol. American Idol no es más que un concurso de cantantes que tiene como finalidad encontrar nuevos artistas.
A día de hoy se considera uno de los programas más populares de la historia de la televisión norteamericana. Así lo demuestra el hecho de que haya sido número uno de audiencia durante seis temporadas consecutivas. American Idol es la búsqueda del mejor cantante del país y el ganador es decidido por lo telespectadores.
Además de los espectadores, el programa cuenta con unos jueces que suelen ser gente relacionada con el mundo del espectáculo.
Imagen del programa America Idol con el refresco Coca-Cola sobre la mesa de los jueces
Dado que American Idol es un programa de una audiencia extraordinaria, no es de extrañar que las marcas comerciales se hayan fijado en ella para promocionar sus productos. En concreto, los patrocinadores de una de las temporadas de American Idol fueron las marcas comerciales Coca-Cola, AT&T (Telefonía) y Ford.
Con estas tres marcas comerciales Martín Lindstrom y el profesor Silberstein decidieron hacer un estudio con un grupo de voluntarios para valorar cuál de estas tres marcas eran las que más y mejor recordaban los voluntarios del estudio. En este artículo sólo me centraré en las marcas Coca-Cola y Ford.
Y los resultados a partir de un estudio neurológico resultaron realmente sorprendentes. Coca-Cola era con diferencia la marca que más y mejor recordaban los voluntarios del estudio.
Es más, el grado de recuerdo era sensiblemente mayor que el de AT&T y significativamente mayor que la marca de automóviles Ford. Incluso el estudio concluyó que los voluntarios recordaban menos la marca Ford de lo que la recordaban antes de empezar el estudio.
¿Qué truco o estrategia utilizó Coca-Cola para ganar la batalla a las otras dos marcas?
La razón de por qué los voluntarios recordaban más la marca Coca-Cola que AT&T o Ford no estaba sujeta al presupuesto de la campaña, puesto que Ford había invertido una cantidad astronómica de dinero, al igual que AT&T y Coca-Cola.
La diferencia entre Coca-Cola y las otras dos marcas radicó en cómo se integraba Coca-Cola en el concurso. Por tanto, no se trataba de una cuestión de dinero, sino del tiempo que la marca permaneció en pantalla.
¿Y cómo lo conseguía? Pues poniendo botelllas en la mesa de los jueces, pintando las paredes con el color rojo, diseñando un sofá con la forma del logotipo, enseñando cómo bebían una Coca-Cola los concursantes después de un esfuerzo y como recompensa, etc.
Por contra, Ford tenía una estrategia más convencional que consistía en emitir cuñas publicitarias y que no guardaban ninguna vinculación con la esencia o leitmotiv del programa American Idol.
Fíjate como el fondo del escenario armoniza con los colores del logotipo de Coca-Cola. Por cierto, el vídeo no tiene desperdicio…
¿Qué había conseguido Coca-Cola?
Coca-Cola había conseguido algo de un tremendo valor para el posicionamiento y recuerdo de una marca y es la de integrarse, la de formar parte de la narrativa del programa American Idol.
Lo que había conseguido Coca-Cola era que el propio refresco formara parte del programa, es decir, se integrara perfectamente en la mecánica del concurso y dejara de verse como una marca para convertirse en un elemento integrador más del programa como pueden ser los concursantes, el presentador, los jueces, el escenario, el público, etc.
El refresco se integra en la dinámica y cobra un gran protagonismo
Martin Lindstrom determinó, por tanto, que no tienes recuerdos de las marcas que no representan un papel integrador dentro del propio guión del concurso.
A la infructuosa estrategia de marketing que aplicó Ford como patrocinador Martín Lindstrom en su libro Buyology lo define con una expresión que me fascinó y que él denomina «ruido blanco«.
Coca-Cola consiguió convertirse en más que una marca, consiguió que dicha marca permaneciera en la memoria de los voluntarios, en la memoria de los espectadores del concurso porque Coca-Cola ya no representaba solamente un refresco, sino los anhelos, los sueños, las aspiraciones, la cultura del esfuerzo, la superación que hace que un grupo de concursantes lo den todo para ganar y que millones y millones de personas se pongan delante del televisor para interactuar, disfrutar y entretenerse con el concurso.
De ahí que Martin Lindstrom concluyera que este tipo de publicidad, la llamada publicidad de emplazamiento, funcionará mejor cuanto más sea capaz de seguir la lógica de la narrativa de un programa.
El famoso sofá Coca-Cola de American Idol
¿Cómo puedes como docente aprovechar la estrategia de Coca-Cola para que tus alumnos recuerden lo que les enseñas en el aula?
Como docente seguro que una de tus grandes preocupaciones es enseñar lo mejor posible para que tus alumnos no sólo sean capaces de aprender lo que les enseñas, sino que también recuerden los conocimientos que les has transmitido.
Pues bien, siguiendo la estrategia de la marca Coca-Cola te habrás dado cuenta de lo importante que es integrar aquello que enseñas dentro del contexto en el que lo enseñas. Me explico. De lo que se trata es de enseñar a tus alumnos desde la utilidad, la integración, y la complementariedad de tu discurso.
Cuanto más y mejor conectes lo que enseñas, cuanto más y mejor integres lo que enseñas más probabilidades tendrás de que tus alumnos no sólo aprendan, sino que también sean capaces de recordar, sean capaces de no olvidar. Ahí van algunas pautas que creo que pueden ser útiles para ti:
- Enseña lo menos posible durante una sesión lectiva, es decir, no abuses de conceptos, de la teoría. Si lo haces, corres el peligro de sobrecargar lo que se de denomina la memoria de trabajo o memoria limitada. Coca-Cola se hace omnipresente en American Idol. Haz lo mismo con los conceptos que enseñes. Haz que se hagan omnipresentes a lo largo de una sesión lectiva.
- Reduce al máximo la enseñanza magistral. Fíjate que la gente recuerda el refresco Coca-Cola sin ni tan siquiera pronunciar el nombre de la marca o publicitarla explícitamente. En muchas ocasiones tienes la sensación de que hablando y repitiendo continuamente lo mismo conseguirás que les quede más a tus alumnos lo que les enseñas. Pero, ¿y si en lugar de repetirlo de forma magistral utilizas otros recursos que hagan que dicho concepto sea omnipresente a lo largo de la sesión lectiva? Y te preguntarás, ¿cómo puedo hacerlo? Aquí van algunas pautas:
- Usa la pizarra tradicional y la pizarra digital como herramienta para insistir sobre tu producto/concepto. Así el mensaje verbal se convierte en un mensaje complementario.
- Haz uso de imágenes y que dichas imágenes sean capaces de generar una emoción o un recuerdo especial que conecte con dicho recuerdo.
- Sírvete de material multimedia como documentales o películas que guarden cierta relación con lo que enseñas.
- Trabaja técnicas de estudio como el esquema o el subrayado. ¿Conoces el esquema de cajas? Aquí te dejo el enlace por si quieres aprender el método que utilizo en mis clases para elaborar esquemas.
- Transforma la memorización de un concepto por una historia, es decir, en lugar de memorizar lo que les has enseñado, haz que tu alumno te lo cuente, te haga una historia de lo que ha aprendido y aún más importante, de lo que ha entendido acerca de lo que le has enseñado.
- Trabaja la asociación de ideas. Esta es otra de las grandes bazas que utiliza Coca-Cola en American Idol. Crea asociaciones que permitan fijar en la memoria de tus alumnos aquello que les enseñes.
- No sólo enseñes, parafrasea lo que enseñes, es decir, clarifica cada concepto y verifica si ese concepto se entiende. Para ello puedes servirte de preguntas preferentemente abiertas. Si quieres saber cómo formular perguntas a tus alumnos aquí te dejo un enlace con ejemplos.
- Haz que un alumno le explique a otro compañero de clase lo que ha entendido acerca de lo que le has enseñado.
- Otros recursos que también pueden funcionar serían:
- Asociar conceptos a colores, animales o nombres propios.
- Crear rimas en la que el concepto adquiere un lugar protagonista.
- Crear acrónimos.
Coca-Cola, el refresco que ganó la batalla al «ruido blanco«.
Acabaré este artículo retomando un concepto que he citado anteriormente y que no es otro que el de «ruido blanco». Coca-Cola aprendió que para permanecer en la memoria de los consumidores hacía falta meterse en su piel, vivir a su lado de la forma más natural posible, de la forma más integradora posible.
Coca-Cola venció la batalla del «ruido blanco«, del olvido, del anonimato y se afianzó como una marca generadora de confianza. Es por ello que tú también eres capaz de vender a tus alumnos un producto como el de la Coca-Cola, una enseñanza que sea integradora, que se adapte al alumno y no al revés, que esté ligada a valores como la cultura del esfuerzo y la superación.
No hay mayor enemigo para el docente que enseña que lo que enseña se convierta en «ruido blanco«, en olvido. Este es tu reto. Este es el reto de todos los docentes. ¿Te apuntas?
Acabaré con esta cita de Benjamin Franklin para animarte a que luches contra ese «ruido blanco«, a que le ganes la batalla al olvido, a que consigas que tus enseñanzas permanezcan en la memoria y en los corazones de tus alumnos:
Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo. [TUITÉALO]
Si estás interesado en leer otras historias tan fascinantes como la de la Coca-Cola acerca de cómo y por qué compramos lo que compramos, te dejo el enlace al libro Buyology de Martin Limstrom. ¡Te sorprenderá!
>>>> Buyology, de Matin Lindstrom <<<<
isabel Del Valle says
Me considero agraciada al tener la oportunidad de suscribirme a su página, pues de ella he aprendido nuevos enfoques para dirigir mis clases y ser más creativa. Los estudiantes de hoy demandan otros enfoques y con ustedes estoy rescatando otro estilo de enseñanaza tras cuarenta años en esta difícil, pero gratificante tarea. Les felicito.
Santiago says
Muchas gracias Isabel y bienvenida a bordo
Jussára says
estou reaprendendo, modernizando meus conceitos sobre como ensinar com esses artigos, mui grata.
Santiago says
Muchas gracias Jussára. Saludos mediterráneos 😉
Fermin Hung says
Excelente articulo, con su permiso lo distribuiré en la comunidad de docentes de Venezuela. Adaptar contenidos del mundo de las empresas, sus estrategias y tácticas, es una manera muy innovadora de despertar en el docente nuevas aptitudes en su labor diaria.
Santiago says
Muy agradecido Fermín. Saludos desde España
Héctor Castañeda Saldaña says
Es gratificante leer tus propuestas, Santiago, y me considero afortunado de que me consideres para mandar tus publicaciones, la de Cocacola, quizá ya había oido ideas semejantes, pero la forma en que lo expones y lo ejemplificas hace que esas ideas sean aterrizables, gracias otra vez por darme la oportunidad de conocer tus ideas.
Atte. Héctor
Olmo Axayacatl says
Una idea muy interesante la que plasmas en esta entrada. Esto me hace pensar que enseñar es, de alguna forma, una cuestión de marketing, solo que educativo. Dicho marketing educativo debe vencer todo el ruido blanco que distrae a los estudiantes.
Santiago says
Gracias Olmo
Vladimir Quintana says
Simplemente genial, no había siquiera imaginado lo que hacía la Coca cola para promover su producto y mucho menos que esas estrategias se pudieran llevar al aula de clases.
Ruben Dario says
Ojalâ algún día yo sea capaz de hacer un blog como el tuyo…
Santiago says
Gracias Rubén. Ojalá que tu blog sea infinitamente mejor que el mío. Mis mejores deseos para ti y los tuyos.
Abel Zela says
Excelente idea y es una gran enseñanza q
Santiago says
Muchas gracias Abel
Virginia Sánchez J. says
Me siento muy afortunada de leer y aprender y sobre todo de poner en practica cada uno de tus acertados comentarios y ayuda como hacer mas enriquecedora nuestra profesión y niños que deseen regresar al aula.
Dios te bendice. Saludos desde Veracruz, Ver. México.
Alicia says
Excelente artículo, muy didáctico como todos los que publicas, son de gran utilidad en nuestra práctica docente.tTe felicito
Santiago says
Muchas gracias Alicia. Recibe un cordial saludo
Pilar Martínez says
¡Bravo! Lo que entendía como aprendizaje significativo acaba de dar un vuelco.
Las estrategias de Coca-Cola rara vez fracasan, pero nunca se me habría ocurrido traducirlas al ámbito laboral.
Gran post.
Santiago says
Gracias Pilar. Nunca te acostarás… 😉
Isabel Alarcón says
Gracias Santiago por este excelente artículo. Lo pondré en mi práctica docente el siguiente semestre. Saludos desde México. Felices fiestas.
Sólo un pequeño detalle. Casi al final del artículo la palabra ocasión, está escrita como ocación.
Santiago says
Gracias Isabel. Corregido 😉
Marco says
Todos esos conceptos forman parte de la metodología de enseñanza del idioma Inglés, lo único en lo que estoy en desacuerdo es en la memoria de trabajo o limitada.
La memorización no es un objetivo práctico para nosotros (ese método es obsoleto hoy día), la racionalización del concepto y su práctica es lo que ayuda al alumno a aprender y recordar sin memorizar.
Saludos.
SHMARKETING says
De buena a primeras, se puede pensar que a una empresa como Coca Cola no le hace falta este tipo de publicidad encubierta para generar notoriedad entre el público de estos realities o talents show, pero esto no es cierto. Incluso siendo tan grande, existen una gran cantidad de menores que aun no conocen la marca ni ha asociado el color rojo y blanco a esta. Si las empresa grandes luchas por aumentar su notoriedad cada cierto tiempo, las empresa pequeñas o medianas debería de luchas más por hacerse ver, tanto en el mundo off como en el online.